Espacios y materiales

El ambiente como tercer educador:
Facilita a lxs menores las diferentes posibilidades de encontrar los caminos a seguir: es abierto y rico en materiales, permitiendo desarrollar habilidades creativas y de investigación.
Los espacios no son estancos (aulas). Sino que se comunican entre ellos, evitando que sean estáticos. Van cambiando en función de las propuestas de lxs menores y sus proyectos. Estos espacios permiten aprender haciendo y respetando los diferentes estilos y ritmos de aprendizaje de cada uno/a.
Los espacios con los que cuenta La Escuelita de Eme están preparados y adaptados a los niños y niñas que van a moverse por ellos de forma independiente. Están agrupados por intervalos de edad, acordes con sus necesidades evolutivas y nuestros principios educativos, pero pueden moverse libremente por todos ellos, ya que la metodología de la escuela se basa en el juego libre y vivencial. Los niños y niñas eligen dónde y con quién jugar.
En lo referente al espacio, no sólo nos referimos a las instalaciones. Se debe garantizar el bienestar del/la menor, para que se produzca el aprendizaje. Para ello creamos una atmósfera y procesos de cambio ricos y desarrollados que producen las situaciones de aprendizaje para que lxs menorxs experimenten.
La mayoría del material es autocorrectivo, partiendo de la metodología de Montessori. Este material permite que el propio menor llegue al acierto sin la intervención de la figura del adulto, sirviendo éste como guía y observador y viendo el error como algo positivo, que le ayuda en la búsqueda de su objetivo.
Además, se realizan propuestas de actividades que inciten al juego, como presentaciones de bandejas sensoriales, ambientes decorados o elementos que causen asombro y motivación, adquiriendo aprendizajes significativos y reales.